Me encanta la Coca Cola bien fría; la abres, y tiene mucha efervescencia. ¿Alguna vez has tomado una Coca Cola que ha estado abierta por un rato y ya ha perdido el gas? No tiene efervescencia, es desagradable. Esperamos que haya efervescencia cuando abrimos una bebida carbonatada, ¿no es cierto? Esperamos efervescencia cada vez.

¡Una vida cristiana apasionada debe ser la regla para cada creyente, no la excepción! No nos conformamos con una Coca Cola que ha perdido su efervescencia. De la misma manera, nunca deberíamos conformarnos con una relación con Dios fría, mundana y aburrida. ¿Te sientes algo inquieto con la idea de que de alguna forma tu relación con Dios, el Dios del universo, pueda perder su efervescencia?

Comienza hoy nuevamente con una apasionante expectativa de abundancia. ¡No te conformes! La disciplina más importante de tu vida, es cuidar el fuego de la devoción en tu corazón. No aceptes una experiencia de fe que esté por debajo de la intención de Dios para ti.
Mientras completas la primera semana de tus 21 días de ayuno, asegúrate de ir escribiendo lo que Dios te está diciendo.

Continúa orando fervientemente por las preocupaciones fundamentales de tu vida. Confía en que Dios va a traerte las respuestas mientras escribes en tu diario tus pensamientos e inspiraciones durante este tiempo.

Juan 10:10. (NTV)
El propósito del ladrón es robar y matar y destruir; mi propósito es darles una vida plena y abundante.

Puedes leer el capítulo completo.